Cuatro tramos y solo 5,9 segundos de diferencia entre Alberto Meira y Sergio Vallejo. El 50º Rallye Rías Baixas no puede haber empezado de una forma más apasionante. La primera etapa ha dejado claro quienes van a estar en la «pomada» a poco que la suerte y la mecánica les acompañen
Los ganadores de las dos últimas ediciones s.e la juegan en la más importante; una cifra redonda, la de las bodas de oro de este rallye. Un bonito recuerdo para el palmarés particular de cada uno de ellos.
Meira ha sido fiel a su estilo en esta prueba y ha salido como un obús, ganando tres de los cuatro tramos disputados en la jornada de hoy. Y en este sentido no ha habido grandes sorpresas. Corre más cerca de casa que nunca y delante de los suyos. Además, y pese a un pinchazo, de momento la fortuna que no le acompaña en el Campeonato Gallego de Rallyes sí lo está haciendo aquí.
Mientras tanto, Vallejo espera agazapado. La diferencia es mínima y, como se temen sus rivales, los 30 km de mañana en Fornelos -históricamente una cronometrada muy propicia para los GT- pueden ser determinantes en el desenlace de esta prueba.
Por lo demás, Fuster cierra el podio, Pernía es cuarto y Joan Vinyes, quinto, domina entre los 2RM con el Suzuki Swift S1600. Carchat, por su parte, de momento supera en la clasificación a un Pedro Burgo centrado en hacer kilómetros y probar cosas con el Porsche. Para mañana toca reglajes más duros en el eje trasero.
Entre los que ya no siguen, «la negra» para los hermanos Pais. Una salida en el tramo de Nigrán puso el desgraciado broche a dos días de muchos sinsabores…