Ya lo hemos dicho más de una vez. No es un tipo de medias tintas. O va o no va. Alexey Lukyanuk lideró el Rallye de Estonia de principio… y casi hasta el fin, aprovechando algunos problemas mecánicos en el Fiesta de su máximo rival por el título, Kajetan Kajetanowicz, para mantenerse al frente de esta prueba en la que bien pudo haber dado un golpe sobre la mesa en su lucha por el ERC, especialmente tras el fiasco de Ypres, rallye al que acudió -al contrario que Kajetan- aunque no pudo terminar.
El caso es que en la penúltima especial el ruso del Fiesta R5 se ha quedado tirado… y sin una rueda. Adiós a una buena oportunidad y otro cero que, nos tememos, va a terminar con la temporada de Lukyanuk, quien ya desde el principio aseguraba andar justo de presupuesto.
Por cierto, Ralfs Sirmacis, ganador en el Acrópolis de este año, se ha llevado la victoria absoluta con un Skoda Fabia R5, superando en algo más de un minuto y medio al campeón en título, Kajetanowicz. El estonio Rainer Aus ha completado el podio, a los mandos de un veterano Mitsubishi Evo IX.
La próxima prueba, de nombre impronunciable, tendrá lugar en Polonia, sobre asfalto y en los montes Cárpatos. Si ya eran pocos los optantes, parece que el ERC va dejando una vez más el camino expedito para que Kajetan el de la sonrisa eterna siga manteniendo su felicidad mientras defiende la corona de 2015.