Los pilotos que salían en posición más retrasada a los primeros tramos del Rallye de Australia se han encontrado pistas más limpias y han liderado la clasificación. Hasta aquí, todo normal. Pero por la tarde, las cosas se han dado la vuelta, como corresponde al continente en el que están «cabeza abajo»…
Bromas aparte, lo cierto es que la cita ha comenzado muy bien para el Hyundai i20 WRC de Dani Sordo. Las especiales estaban cubiertas de una gruesa capa de tierra resbaladiza (apunta wrc.com) y el puesto de salida del español le ha permitido encontrarse una superficie sobre la que podía avanzar más rápido. Lo mismo le ocurría a su compañero en la escuadra coreana Hayden Paddon -recordemos que en esta prueba el neozelandés sustituye al español en el equipo principal, mientras que Sordo «baja» a la segunda formación-, que le seguía de cerca. Pero por la tarde, el polvo en suspensión ha hecho de las suyas y ha devuelto la situación, digamos, a su «orden natural». O casi, porque no es Sebastien Ogier quien está al frente de la clasificación, sino el segundo piloto de Volkswagen, Jari-Matti Latvala.
El finlandés ha remontado desde la quinta plaza y se ha hecho con el liderato en el último tramo del día. El bucle matinal terminó para él casi 11″ por detrás de Kris Meeke (Citroën DS3 WRC), que se había colocado en el primer puesto, adelantando a Sordo. Pero en la segunda pasada por las especiales, Latvala ha logrado tres scratches seguidos: Meeke ha sido relegado a la segunda posición… Aunque sólo tiene una desventaja de dos segundos.
«Esta mañana no me veía confiado, pero he atacado en los tramos de la tarde. En el último no he tenido muy buenas sensaciones, ya que los neumáticos estaban demasiado gastados. Calculaba que estaría contento si no perdía más de cinco segundos con Ogier y estoy a 4,7; he sido más rápido que Meeke», ha asegurado el finladés a la web británica.
La gestión de las cubiertas ha sido clave durante la jornada… y también lidiar con el polvo en suspensión. Eso es lo que ha retrasado a Meeke, según comentaba: «No podía ver el morro del coche. Conducir en sexta velocidad en estas condiciones no es sencillo».
La «tesitura» de Ogier
Ogier ha sido el más perjudicado esta mañana al tener que abrir las pistas; posiblemente en ningún otro rallye lo haya notado más que aquí. Pero por la tarde, la superficie estaba más limpia y ha ido remontando: ahora es tercero. Está justo por delante de Andreas Mikkelsen, su compañero de equipo, quien ha superado a Sordo por tres segundos.
El líder del certamen se va a dormir echando cuentas: para empezar, el sábado no tendrá que enfrentarse a los tramos en primer lugar, ya que Stephane Lefebvre (reemplaza a Mads Ostberg en Australia tras el accidente del noruego en los entrenamientos) ha roto la suspensión de su Citroën al golpear una piedra; se reenganchará mañana y, por lo tanto, él abrirá las especiales. Latvala tiene que lograr diez puntos más que Ogier para evitar que el galo se corone este fin de semana como campeón del mundo -por tercera vez ya-. Efectivamente, el título está muy cerca…
Clasificación tras la primera etapa del Rallye de Australia
1. J-M. Latvala / M. Anttila (Volkswagen Polo R WRC), 1:15:29.1
2. K. Meeke / P. Nagle (Citroën DS3 WRC), + 2.0″
3. S. Ogier / J. Ingrassia (Volkswagen Polo R WRC), + 4.6″
4. A. Mikkelsen / O. Floene (Volkswagen Polo R WRC), + 12.9″
5. D. Sordo / M. Martí (Hyundai i20 WRC), + 15.9″
6. H. Paddon / J. Kennard (Hyundai i20 WRC), + 25.5″
7. T. Neuville / N. Gilsoul (Hyundai i20 WRC), + 37.2″
8. O. Tanak / R. Molder (Ford Fiesta RS WRC), + 40.2″
9. E. Evans / D. Barritt (Ford Fiesta RS WRC), + 2:21.8″
10. L. Bertelli / L. Granai (Ford Fiesta RS WRC), + 3:37.9″