¡Qué vital es contar con un buen sistema de notas! Y eso bien lo saben todos aquellos que buscan la progresión en su carrera deportiva en los rallyes. No será ni la primera ni la última vez que escuchemos de boca de algún equipo afirmaciones como «vamos a pulir las notas en pretemporada» o cosas por el estilo.
La realidad es que no siempre el código que establece un piloto se adapta a las necesidades cuando el ritmo de carrera es intenso, los rallyes cambian de superficie, las curvas se empiezan a acumular mucho más que cuando empezabas en pruebas regionales o, simplemente, descubres que con la convención escogida no tienes información suficiente para dar un paso más y rebajar esos segundos que son determinantes en pos de una victoria.
Claro, como en todo, en las notas también existen ciertos estándares que se pueden adaptar a las necesidades de cada uno, y ese parece haber sido el paso que ha dado el irlandés Jon Armstrong, piloto del ERC Junior que ha reconocido en la web de este campeonato su cambio en el código de anotaciones. Hasta ahora Jon (ojo, un piloto en formación y con solo 20 tacos) usaba el estilo «Colin McRae», diferenciando las curvas de 1 a 6 y siendo 6 la más rápida. «El sistema trataba de indicar la marcha con la que tenía que abordar cada giro«, señala el británico, «pero no era lo suficientemente exacto que yo necesitaba».
La solución parece haber llegado con el sistema de notas que usan pilotos como Ogier y Loeb, «lo que me permite conocer el tipo de curva mejor que antes. Ahora, además, uso también descripciones de velocidad en cada curva. Cuando entrenamos pego marcas en el volante y ello me permite saber exactamente el grado de giro, sin ningún margen de error. Creo que con estas notas he dado un paso adelante y seguimos mejorando (él y su copi, Noel O´Sullivan) con cada kilómetro que recorremos», reconoce Armstrong.
Sin demasiadas referencias, la única prueba de mejoría ha sido el quinto puesto logrado por este equipo y su Peugeot 208 R2 en el Rallye Liepaja … la demostración definitiva tendrá que llegar, dentro de muy poco, en la prueba de casa.