Los planes de Toyota consistían en poder servir la primera unidad del Toyota GT86 CS-R3 en mayo de este año, pero la marca japonesa se ha visto obligada a retrasar el debut de su nuevo coche.
El problema está en la dirección asistida, que debe ser de serie según la normativa R3, la configuración del coche ha hecho que sea difícil encontrar dicho componente, induciendo un retraso en el proyecto ya que se deben realizar nuevos tests con la dirección asistida elegida para la homologación.
Por todo ello se estima que los primeros kits serán entregados a los clientes en octubre, pensando en la temporada 2016. El HJS TMG GT86 CS-R3 Trophy se ha pospuesto hasta 2016, la marca devolverá la inscripción o se la mantendrá para 2016 un trofeo que mantiene la oferta de probar el Toyota WRC al ganador.