Cosas del Niño

| 03/01/2016

Primera etapa de verdad en el Dakar 2016 y primera cancelación -esperemos que sea la última- por motivos de seguridad. Las fuertes tormentas y lluvias intensas que han afectado al recorrido de hoy entre Rosario y Villa Carlos Paz han llevado a la ASO a sucesivos retrasos en la salida de la cronometrada hasta que finalmente se ha optado por suspenderla. Asegura la organización que si bien la carrera no se detiene por las lluvias, sí lo hace cuando no se puede garantizar el normal funcionamiento del dispositivo de seguridad. Y en esta ocasión los aviones y helicópteros no podían despegar; aunque también los participantes tenían que vadear varios ríos, había crecidas, y la mejor decisión ha sido esa. Bien es verdad que muchos pilotos han suspirado al ver que no se disputaba la etapa, temiéndose -especialmente las motos- un día de órdago, que aún así se han comido de enlace. Entre los coches ha habido de todo; a quien más perjudica es a quienes pueden aprovechar esta primera semana más pistera, estilo WRC, para posicionarse de cara a las etapas de la semana que viene, más duras y técnicas. Un día menos, una opción menos.

¿Y quién tiene la culpa de este marrón? Pues en principio El Niño. Sí, ese fenómeno climatológico que cada varios años revuelve el tiempo en el cono sur americano, aunque también afecta al resto del globo. Siendo muy someros en una explicación científica para la que no estamos capacitados, este fenómeno se produce por el desplazamiento de aguas cálidas en el Pacífico hasta latitudes más altas, frente a las cosas de Perú y Ecuador. El incremento de la temperatura del mar provoca mayor humedad, aumento de las bajas presiones, formación de nubes y sobre todo, tormentas… además de un aspecto económico que no se suele mencionar pero que también es vital en muchas comunidades, como es la disminución de las capturas de pesca porque los bancos se desplazan buscando aguas más frías.

El caso es que este año todos estaban avisados de que el fenómento de El Niño iba a ser de los más intensos. La NASA ya lo ha venido advirtiendo desde hace tiempo, y de hecho el pasado mes de agosto Perú decidía no apoyar la prueba automovilística en previsión de males mayores y centrando sus esfuerzos en salvaguardar a la población. Esta situación obligó a un cambio de última hora de gran parte del recorrido del Dakar que ahora, y como también se preveía hace algunos días, se ha encontrado de frente con la cara menos amable del verano austral

Sí, porque algunos medios locales apuntan a que la inestabilidad se mantendrá así durante esta semana en las zonas por donde está previsto que pase la carrera. La provincia de Jujuy (llegada de la etapa del próximo martes, desde Termas Rio Hondo) también se ha visto afectada por fuertes tormentas, al igual que la de Salta.

Por cierto, lo de El Niño viene porque se trata de un fenómeno que comienza en las últimas semanas de diciembre, próximas a las fechas navideñas. Y no, no llega precisamente con un pan debajo del brazo. Más bien con agua, crecidas y barro para todos los participantes… ah! y temperaturas muy altas cuando entren en Bolivia.

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