Se ha mantenido fiel a los atmosféricos hasta el último momento, y además con éxito, pues en lo que llevamos de temporada en el ERC el francés Robert Consani ha sumado un segundo puesto en el Jännerrallye y un quinto en Liepaja, lo que le permite ocupar la tercera plaza provisional en la clasificación general de este Campeonato. Pero los principales rivales hace tiempo que se han subido al carro R5, con lo que su veterano Peugeot 207 S2000, aunque valiente bastión de defensa de esta categoría, pedía a gritos el recambio en una guerra en la que costaba mantenerse en primera línea, más aún siendo un equipo privado.
Y el sustituto ha llegado, en forma de espectacular -por la decoración- Citroën DS3 R5 que el piloto galo estrenará en el Circuit of Ireland Rally. «Nos espera un reto difícil para aprender todo de este nuevo coche», asegura Robert, «el trabajo con los ajustes va a ser enorme, pero queremos empezar a familiarizarnos ya con este fantástico vehículo».
Recientemente Consani recibía un premio de 7.000 euros por los resultados obtenidos en las dos primeras pruebas de la temporada (5.000 por Austria; 2.000 por Letonia) y el francés aseguraba que los iba a invertir «en algo más grande». No ha tardado mucho en hacerlo.