Tiempos difíciles en el mundo de las carreras; al menos para los jóvenes valores del automovilismo que actualmente se encuentran con una escalera de progresión en este deporte mellada por la falta de peldaños intermedios y a veces con saltos al vacío tan grandes o imposibles que terminan hundiendo en el foso del olvido a muchos de esos pilotos que prometieron en su momento, pero no encontraron la forma de seguir ascendiendo. Por eso, apuestas como la que ha presentado hoy oficialmente la empresa Rallycar con motivo del Rallye de Canarias son siempre de agradecer, aunque luego la repercusión en medios o el apoyo institucional en estos momentos tan importantes se hayan echado de menos.
Tres coches, tres pilotos, tres objetivos concretos y una filosofía común para el Rallycar R2 Team. Manel López Castrillón, alma mater detrás de este proyecto, lo resume con claridad: «actualmente el Campeonato de España de Rallyes necesita una buen certamen R2. Tras la Copa Suzuki Swift los pilotos se encuentran con un gran vacío que hay que cubrir. Para muchos de ellos el siguiente paso es imposible y se quedan en casa, por eso siempre creí que había que dar opciones. Y tras barajar distintas alternativas surgió la idea de crear este proyecto. Proyecto que arrancó con Amalia Vinyes, que ya tenía pensado dar el salto a los rallyes en esta categoría, y que me llevó a tirarme a la piscina y ampliarlo con dos vehículos más. Aquí también pensamos en varios nombres, hasta que se dió forma al equipo final en el que, como en todos los proyectos, se han marcado unos objetivos o metas: así tenemos a Amalia peleando por el trofeo femenino, a Pablo Pazó luchando por el título en R2 y a Roberto Blach disputando el apartado junior, pero sobre todo cumpliendo con su fase de formación, completando kilómetros, acabando rallyes y sumando experiencia».
De repente, y como ya comentamos la semana pasada con el caso de Roberto Blach, la temporada ha cobrado otro cariz distinto para los integrantes de este equipo. El caso de Pablo Pazó también es significativo. Agotadas sus opciones en el Nacional y con las miras puestas ya en el certamen autonómico, de repente todo cambió para el gallego al que las puertas del Campeonato de España se le volvían a abrir de par en par, y además con necesidades y requerimientos muy distintos a los que venía teniendo hasta ahora. Un nuevo panorama en el que, todavía emocionado por la oportunidad y sin poder quitarse la sonrisa de la boca, el campeón de la Copa Suzuki Swift de 2012 quiere centrar ahora todos sus esfuerzos para devolver con resultados la confianza que se ha depositado en él.
Los tres integrantes del Rallycar R2 Team abordarán la temporada completa en el Nacional de Rallyes (a excepción de Amalia Vinyes en el caso del Sierra Morena) con los Ford Fiesta R2. «En un principio no importaba que el equipo hubiera sido multimarca», comenta Manel Castrillón, «pero se dió la coincidencia de que por un lado Roberto Blach está corriendo con su propio Ford y que, cuando se barajaron las opciones de los coches, la alternativa de RMC con esta marca, de la que no tenemos apoyos, fuese una de las más económicas a la hora del alquiler, y además con su compromiso de que cuando los nuevos Fiesta Ecoboost estuviesen disponibles y funcionasen correríamos con ellos».
Y sí, tal y como comentábamos con el caso del piloto junior de esta formación, en un principio Blach seguirá con su unidad atmosférica, siendo las versiones turbo de tres cilindros para la hermana de Joan Vinyes y para Pablo Pazó. En cualquier caso la llegada de los nuevos modelos siempre estará vinculada a su resultado en el Rallye de Portugal -en términos de fiabilidad más que de rendimiento-.
Lo que está claro es que la presencia de este equipo ha revitalizado una categoría tan necesaria como atractiva. «Con Peláez, Víctor Senra, el equipo Opel y ahora nosotros creo que los R2 empiezan a tener presencia», sostiene el maximo responsable de la empresa Rallycar, «pero esto no puede quedar aquí y necesitamos ayuda, porque a poco que algún piloto destaque a mitad de temporada y tenga el título a tiro, el resto va a parar. Creo que es necesaria la motivación y las ayudas a la gente», insiste Castrillón quien, diciendo y sin decir, deja claro que la presencia de algún tipo de premio, como ya ocurre con las copas, es vital para animar este que ya se puede -y debería de…- considerar como segundo escalón en los rallyes.
Por cierto, el Rallycar R2 Team se ha planteado como un proyecto de continuidad, «igual con otro coche y en otra categoría», pero sí con la misma filosofía.